Cómo Tener Una Sonrisa Hermosa Que Dure Muchos Años

Te voy a revelar un secreto que, hasta ahora, sólo unos pocos conocen.

Cuando los pacientes nos preguntan qué pueden hacer para tener una sonrisa duradera, que se mantenga hermosa y armónica en los próximos años, están buscando que les digamos un secreto escondido para que los dientes se mantengan intactos.

Y la verdad es que el secreto sí existe, pero es un secreto que se esconde en nuestras propias narices.

¿Quieres saberlo?

Es simple. Tiene 3 partes:

1) Lávate los dientes 3 veces al día durante 5 minutos de forma suave, aplícate seda dental una vez por la mañana y una vez por la noche. Pero debe ser de forma suave, si te los lavas con mucha fuerza, vas a desgastar la superficie de tus dientes y se van a debilitar.

2) Cuida tu boca de accidentes físicos. Si participas en actividades en las que tus dientes pueden ser aporreados, usa la protección siempre. Es fácil pensar que no te vas a aporrear, pero la verdad es que en el momento menos pensado puedes sufrir un golpe inesperado.

Esto también incluye comidas duras como la costilla, el chicharrón muy crocante, el patacón duro, la pasta dura de la pizza, e incluso mecato como el maní que tienes que morder con mucha fuerza.

Estas comidas no las debes eliminar, pero sí las debes comer con cuidado para que no te vayan a fracturar un diente.

3) Asiste a una cita con un odontólogo de Bio Ortodoncia cada 6 meses. Esta parte es vital y te voy a explicar por qué. Así te cepilles bien los dientes, y te los cuides, pueden haber amenazas escondidas que están esperando un momento oportuno para atacar y hacerle daño a tus dientes.

Por ejemplo: Las caries se forman como un pequeño punto en la superficie de uno de tus dientes, y con el tiempo empiezan a crecer y crecer y hacen un hueco en la superficie del diente. Si se detectan a tiempo, en cuestión de minutos se puede limpiar esa caries de tu diente, rellenarla con algo que llamamos resina, y ya queda resuelto.

Pero si dejas que pase tiempo, entre 7 y 8 meses, esa caries puede llegar hasta el nervio de tu diente y el dolor que sientes se vuelve insoportable. Además, eso puede implicar que necesites una endodoncia o incluso podrías perder ese diente.

Otro ejemplo: Cada vez que te lavas los dientes, hay una pequeña cantidad de comida que queda en tus dientes que no alcanza a salir.

Esta comida, después de unas horas, se calcifica y se convierte en cálculos dentales.

Estos cálculos, si dejas que avancen lo suficiente, generan problemas en el hueso y la encía como inflamación, infecciones, e incluso pueden aflojar los dientes.

Cuando visitas al odontólogo cada 6 meses, y él (o ella) ve que tienes algo de cálculos, basta con una buena limpieza para poder removerlos y que tus dientes se queden intactos.

Si en vez de eso esperas a sentir la inflamación, el dolor, o que tus dientes se aflojen, vas a necesitar un tratamiento más complejo y costoso que una limpieza para poderlo solucionar.

Cuando asistes cada 6 meses al odontólogo, estas amenazas escondidas no tienen tiempo de hacer daño significativo.

El problema, está en el momento en el que un paciente piensa: “Yo no necesito ir cada 6 meses, yo vuelvo a pedir cita cuando sienta que la necesito”.

Eso es respetable, pero pone en peligro la durabilidad de tu sonrisa.

Este es uno de los casos en los que es mejor prevenir que lamentar.

Ya tienes el secreto para que tu sonrisa pueda durar años como está.

Si todavía no tienes la sonrisa que deseas, pide una cita con nosotros y te podremos ayudar.

Llámanos al 262 65 65 o pide una cita registrando tus datos en el formulario de abajo.

Te esperamos pronto.